Se trata de una innovación surgida de la mente de un ingeniero francés, Jean-Paul Augereau, que en numerosos países de África, Asia y América Latina, se ha erigido en la solución al problema de la escasez de agua. Safe Water Cube permite filtrar cualquier agua y hacerla potable.
Tras sobrevivir a una muerte segura debido a una septicemia contraída en Egipto tras lavarse los dientes con agua sucia, este ingeniero (que tuvo que someterse a un trasplante) ha decidido devolver a la humanidad el gesto que le salvó la vida. Y la forma de hacerlo ha sido inventando este sistema de tratamiento, que limpia el agua y la hace apta para cualquier uso.
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